Tras la Primera Guerra Mundial, el Sr. Leboulch instala su taller de carretería en la Vieille-Lyre.

En aquella época, Leboulch estaba a la vanguardia del mercado de los esparcidores. Este es el inicio de la producción de los chasis de acero.

La aparición de las primeras bañeras monocasco y de la flecha resorte marca la historia de la maquinaria agrícola. Las primeras exportaciones se dirigen a Europa y África.

Se construye la histórica planta de 5 000 m². El número de trabajadores ha aumentado a 91 y el de representantes a 7.

La concepción de las cajas está estandarizada, con puertas oscilantes con gran despeje y brazos reforzados, que están «patentadas Leboulch».

Leboulch se integra en el grupo JOSKIN, lo que da un nuevo impulso a la marca. Se realizan importantes inversiones y se rediseñan todos los productos para el lanzamiento de la nueva gama «Evolution».

JLB leboulch forma parte de un sólido grupo industrial gracias a una fabricación estandarizada, modernos procesos de producción y un propio departamento de investigaciones. Bajo el impulso del grupo JOSKIN, las infraestructuras de JLB leboulch han sido objeto de una renovación completa para responder mejor a las exigencias de la agricultura mediante un funcionamiento interno eficaz.